- Detalles
-
Publicado el 20 Febrero 2019
La imaginación de las niñas tacneñas ha permitido crear 1.500 libros elaborados con cartón reciclado y así darle más esperanza de vida a la Tierra
“El año 2030 es la fecha límite de la humanidad para evitar una catástrofe en la Tierra”, fue el mensaje de alerta presentado por científicos de la ONU a inicios de octubre. De esta forma, pidieron acciones urgentes para sostener el calentamiento global en 1,5 grados centígrados como máximo para impedir la extinción total de los arrecifes de coral y la exposición de diez millones de personas a inundaciones.
Entre los desechos que contaminan el mundo no solo está el plástico y los artículos electrónicos, también se encuentra entre ellos el cartón, que si bien se degrada en un año, causa desorden ambiental. Este material formado por varias capas de papel superpuestas es utilizado para fabricar embalajes y cajas de diversos tipos que muchas veces terminan en la basura en menos de un día.
El cartón es un producto reciclable, siempre y cuando no le haya caído contenido orgánico. Se puede reutilizar para formar cajas nuevas, carteles y otros tipos de estructuras, dependiendo de la creatividad de cada persona.
--- Creatividad para cuidar el planeta ---
Mónica Lanchipa es docente de la Institución educativa Santísima Niña María de Tacna y su mente innovadora ha permitido cuidar el medio ambiente. Ella creó un proyecto que permite a los niños imaginar historias y plasmarlas en libros de cartón reciclado, así poder educarlos y enseñarles a velar por el lugar en donde viven.
“En 2007 nació la idea de mi proyecto 'Unidos en defensa de un ambiente sano y por la paz'. Fue a raíz de un trabajo que debía hacer mi hija para su feria de ciencias. En casa, pensamos en hacer un proyecto de reciclaje, reutilizando el cartón. Dos años después, me di cuenta de que podía aplicarlo en mis aulas”, expresó la docente.
Es así como surgió “Librito cartonero”. El impulso de la profesora Mónica sirvió para que los alumnos comiencen a explorar su creatividad y las diferentes problemáticas de la sociedad, como la contaminación y la violencia contra la mujer.
El proyecto ganó en 2013 el premio “Buenas prácticas” del Ministerio de Educación. Con el paso del tiempo, se pudo compartir la experiencia en Costa Rica, México y Argentina. En 2016, fue premiado por Fundación Telefónica con un módulo de Aula Móvil (Hoy Aula Digital) por lograr que más de 200 estudiantes creen cuentos, poemas y todo tipo de historias, relacionadas al cuidado y preservación del medio ambiente.
--- Cuentos y aventuras sobre cartón reciclado ---
Tacna es un departamento de Perú que limita con Chile y se encuentra a hora y media de viaje partiendo en avión desde Lima. Es conocida como la Ciudad Heroica, por sus distinguidos servicios para la Independencia del Perú. En 2019, cumplirá 100 años bajo la tutela de nuestro país, luego de haber sido parte del vecino del sur tras la Guerra del Pacífico.
Esta localidad se caracteriza por tener una fuerte actividad comercial entre galerías y mercados, que al final del día dejan bastantes residuos de los productos vendidos, entre ellos cartón. Trabajando con los padres de familia y las alumnas del colegio Santísima Niña María, se comenzó a recoger este material para convertirlos en libros.
La profesora inició “Librito cartonero” hace cinco años con las alumnas del quinto año de primaria de la institución educativa. Ellas recorrían los mercadillos de Túpac Amaru y de la Av. Bolognesi de Tacna para recolectar cartón y así comenzar a crear cuentos ecológicos para fomentar la lectura y escritura de las estudiantes.
Los cuentos se hacen dentro del área de comunicación, mientras que el armado del libro, en el de arte. No se realizan correcciones de estilo, ni de caligrafía, tampoco de ortografía, permitiendo a las niñas escribir todo lo que sueñan, anhelan y piensan sobre su mundo. “No les corregimos porque podemos matar su creatividad, luego les corregimos, les mencionamos en qué parte tiene que mejorar y realizamos un plan para que escriban mejor y no cometan errores”, cuenta la educadora.